De visita en la ciudad de Campeche el pasado fin de semana, Moreira arengó: “A mí que no me salgan con que quieren la reforma laboral primero, ni la ley de seguridad, ni la política. Primero la reforma a la Ley de Coordinación Fiscal”.
En respuesta, la legisladora y consejera nacional panista, Gabriela Cuevas, emplazó a Moreira a debatir sobre las finanzas de las entidades federativas, cuyo endeudamiento conjunto llegó a 315 mil millones de pesos en el primer trimestre de 2011, lo que representa un aumento de 122 por ciento en 10 años.
Por ello, dijo en conferencia de prensa en el Palacio de San Lázaro, “el país no está para chantajes partidistas, pues si algo hemos buscado desde el año pasado es que las finanzas públicas estatales se transparenten, que ya no se sigan endeudando, porque hay estados que tienen comprometido hasta 120 por ciento de sus ingresos”.
La también presidenta de la Comisión del Distrito Federal de la Cámara de Diputados consideró inaceptable el “regateo” y el “chantaje” del PRI.
Por separado, el coordinador de los diputados federales del PRD, Armando Ríos Píter, secundó el reproche a Moreira.
“Lo que declara el presidente del PRI obviamente es una especie de chantaje contra esta Cámara, pero especialmente contra la ciudadanía. Está poniendo como condición para avanzar en las reformas que sus estados tengan dinero en el próximo proceso electoral”.
Más aún, el legislador perredista sostuvo que “este tipo de chantajes más bien huelen a actitudes gangsteriles que a posiciones de Estado, como las que requiere actualmente esta Cámara de Diputados y como las que se necesitan para garantizar las reformas que hoy necesitan los ciudadanos”.
Mientras tanto, en el Senado, el vicecoordinador perredista, Javier Castellón, señaló que es una “burda y vil extorsión” pedir que salga una Ley de Coordinación Fiscal de la que no existe iniciativa presentada a cambio de otras leyes que están en discusión; mientras los panistas Alejandro Zapata y Ramón Galindo dijeron que es una “estafa y un chantaje”, lo que convierte al presidente del PRI en el “Pinocho más grande del país”.
No obstante, Zapata diferenció y dijo que una cosa son los senadores del PRI, que sí han aportado a reformas estructurales, como la propia Ley de Seguridad Nacional y otras, que han atorado sus pares en la Cámara de Diputados, con el respaldo de la dirigencia de su partido.
En ese sentido, el también panista Ramón Galindo dijo que al pedir primero dinero para sus gobernadores, lo que hace Moreira es un chantaje y una estafa.
MILENIO
México • Fernando Damián y Angélica Mercado
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