En medio de disputas internas y jurídicas por el liderazgo, aunado a la ausencia de una presidencia electa desde 2006, el PRI en el DF se prepara para la renovación de su dirigencia, dos años después de lo que mandatan sus estatutos.
Sin embargo, la realización de ese proceso interno está en riesgo, debido a las quejas interpuestas por militantes de ese partido ante el Tribunal Electoral del Distrito Federal (TEDF), que podría anular la convocatoria, para lo cual el tricolor buscaría como opción el eventual nombramiento de un delegado especial para que lidere las acciones rumbo a las elecciones de 2012.
De acuerdo con los tiempos establecidos en la convocatoria, el 31 de julio iniciará formalmente el proceso de renovación de la dirigencia local con el registro de las fórmulas interesadas.
Hasta el momento, han manifestado su interés las planillas Roja, encabezada por el diputado Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre; la Verde, con gente cercana a María de los Ángeles Moreno, y la Blanca o también llamada “Tercera Vía”, comandada por Manuel Jiménez Guzmán y Rosario Guerra.
El 1 de agosto se dará a conocer la validación de registros y del 2 al 13 de ese mes se realizarán las campañas, para lo cual cada fórmula podrá gastar 2 millones 440 mil pesos, que corresponden “al 5% del monto autorizado para la elección constitucional anterior para elegir jefe de Gobierno”, que en 2006 fijó el Instituto Electoral del DF en 48.8 millones de pesos.
La convocatoria establece que el PRI no dará dinero para las campañas, por lo que las fórmulas deberán allegarse recursos propios u obtener “aportaciones y donaciones de origen lícito”. Tampoco podrán contratar tiempo en radio y televisión ni recibir financiamiento “de cualquier ámbito del gobierno”.
Otro punto es que cada fórmula deberá tener a una mujer, “y se procurará que uno de ellos sea joven”.
El 14 de agosto, a través de una asamblea de consejeros políticos, se elegirá la fórmula ganadora y el 21 del mismo mes concluirá el proceso, cuando será renovado el Consejo Político.
Sin dirigencia electa
De acuerdo con el artículo 163 de los Estatutos del PRI, las dirigencias nacional, de los estados y del DF deben renovarse cada cuatro años.
En el caso del DF, la última elección fue en enero de 2005, cuando obtuvo el triunfo María de los Ángeles Moreno, quien renunció en diciembre de 2006, ya en funciones como senadora, y su lugar lo ocupó Jorge Schiaffino.
Año y medio más tarde, en junio de 2008, Schiaffino dejó el liderazgo priísta y en su lugar llegó Jaime Aguilar Álvarez, como delegado especial en funciones de presidente en tanto se realizaba una nueva elección, programada originalmente para 2009.
Manuel Jiménez Guzmán aseguró que hasta el momento integrantes de las planillas se han conducido de forma civilizada, sin descalificaciones.
Consideró que en esta elección “no hay dados cargados”, pero dijo que “si el PRI no quiere caer en una vorágine que los lleve a perder la elección, es necesario sumarse al llamado de unidad y lealtad que hizo Humberto Moreira”, líder nacional del PRI.
Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre dijo observar un proceso tranquilo, pero no descartó que se interpongan diferentes procesos ante el TEDF por integrantes de otras planillas.
El diputado federal, que buscará dirigir al PRI-DF, aseguró que cuenta con el respaldo de unos 2 mil 500 consejeros políticos —con firmas— de los casi 3 mil 400 que votarán el día de la elección y el apoyo de cuatro de los seis sectores del PRI, pues parte de los requisitos es que los candidatos cuenten con el aval de la estructura priísta.
Las impugnaciones
En el TEDF aún están pendientes dos fallos que podrían afectar el proceso interno del Revolucionario Institucional; incluso, podría suspenderse el relevo.
El primer caso se refiere a una queja que interpuso el TEDF ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), luego de que en enero el primero ordenó al PRI local renovar a la dirigencia, al resolver un recurso de militantes priístas.
No obstante, el Comité Ejecutivo Nacional (CEN), a través de la coordinación de Asuntos Jurídicos del PRI, solicitó en febrero la intervención del TEPJF, con el argumento de que al ser un instituto político nacional un tribunal local no podía influir en la vida partidaria, por lo que el órgano colegiado anuló la instrucción del organismo electoral capitalino en marzo.
También en marzo, el TEDF interpuso la queja, al argumentar que hubo “contradicción de criterios” respecto de otros juicios para proteger los derechos político-electorales de militantes en otros estados, y finalmente en abril el TEPJF resolvió que es “competencia de los tribunales electorales de las entidades conocer de estos conflictos”.
Ante ello, sigue pendiente la resolución final, aunque el PRI nacional se adelantó a dicho fallo y el 29 de mayo emitió la convocatoria.
El segundo juicio lo interpuso Armando Barajas contra la convocatoria emitida por el CEN, en el que pide la anulación de la misma, resolución que también está pendiente en el TEDF.
En cualquiera de los dos casos, el PRI tiene listo un plan B, según fuentes de ese partido. La estrategia sería nombrar a un delegado especial.
Ese escenario se habría previsto en la reunión de Humberto Moreira con gobernadores a mediados de julio, donde tocaron seis temas torales, entre ellos la renovación del partido en el DF. Entre los nombres que se mencionan para delegado están Ricardo Aguilar, secretario de Organización del CEN del PRI, y la ex diputada Beatriz Pagés.
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